El futuro está moldeado por la educación al cambio climático
En este Día Internacional de la Educación, únase a David Wilgenbus, un experto de renombre en educación científica y desarrollo sostenible, mientras exploramos los desafíos cruciales de la Educación sobre el Cambio Climático (ECC). Con una amplia experiencia liderando programas educativos que llegan a más de 100,000 aulas en Francia y en el extranjero, David ahora se desempeña como Director Ejecutivo en la Office for Climate Education (OCE).
¿Cómo movilizamos a las futuras generaciones para abordar los desafíos climáticos? ¿Cómo concretamos esta misión enfatizando el papel de los maestros dentro de los sistemas educativos globales?
Cambio climático, una realidad para abrazar
Las apuestas son altas. El cambio climático se presenta como uno de los desafíos más significativos de nuestro tiempo, exigiendo una acción colectiva rápida y ambiciosa. A pesar de la fuerte demanda expresada por una juventud altamente movilizada y la comunidad docente, la Educación sobre el Cambio Climático (ECC) sigue estando en gran medida en pañales en Francia.
Los jóvenes, en busca de información, a menudo se pierden en el tumulto de los medios y las redes sociales, luchando por distinguir los hechos científicos de los discursos de defensa, el escepticismo climático o los discursos catastróficos. Esta situación alarmante resulta en una comprensión deficiente del problema y una eco-ansiedad que afecta al 75% de los adolescentes en Francia.
En este contexto preocupante, el desafío crucial es ayudar a estos jóvenes a navegar hacia una comprensión profunda del problema, enfatizando al mismo tiempo la existencia de soluciones. La UNESCO subraya que la educación es la palanca más transformadora para la acción climática, un principio reafirmado en el Artículo 12 del Acuerdo de París. La ECC debe equipar a los jóvenes con conocimientos, habilidades y actitudes para que puedan proyectarse como actores activos en un mundo en transformación, no simplemente como víctimas.
Apoyando a los maestros en un clima que cambia
El último informe de la UNESCO revela que el 95% de los maestros consideran esencial enseñar el cambio climático; sin embargo, menos del 30% se siente capaz de hacerlo. ¿Por qué? Se enfrentan a una falta significativa de oportunidades de capacitación y herramientas pedagógicas adecuadas para apoyarlos.
Ciertamente, el tema del clima es vasto y complejo, y es nuevo para la mayoría de los maestros que nunca han recibido capacitación sobre este tema durante su propio recorrido educativo. Comprender el cambio climático requiere dominar conceptos científicos clave, así como poder convocar otros conocimientos y habilidades de las "humanidades" (historia, geografía, literatura, economía, artes, etc.). Este enfoque interdisciplinario no es evidente en el sistema educativo francés. Además, es esencial permitir que los estudiantes gestionen sus emociones, imaginen e implementen soluciones. Esto implica que los profesores, junto con sus colegas no docentes (directores de escuela, personal administrativo), deben estar familiarizados con la pedagogía de proyectos, equipados para manejar aspectos psicoemocionales, en particular la eco-ansiedad, y abiertos a la colaboración externa que involucra a toda la comunidad en proyectos.
Lograr esto requiere nuevas herramientas pedagógicas basadas en una sólida base científica, abiertas a disciplinas no científicas y basadas en pedagogías activas. También requiere formación continua y apoyo para los maestros para ayudarles en el terreno en la realización de sus proyectos educativos.
La Office for Climate Education, pionera en educación sobre el cambio climático
Desde 2018, la Office for Climate Education (OCE) ha capacitado a decenas de miles de maestros e implementado proyectos que han permitido que cerca de 2 millones de estudiantes en todo el mundo trascienden los límites del aula y actúen sobre el cambio climático.
La Office for Climate Education se destaca como un actor único en el panorama de la ECC, cerrando la brecha entre las comunidades científicas y educativas. Colaborando tanto con los ministerios de educación y medio ambiente, la UNESCO, el IPCC, las autoridades locales, ONG e incluso el mundo empresarial, la OCE desempeña un papel central en la implementación de la educación climática.
Con un equipo multidisciplinario de profesionales y expertos, la OCE, firmemente establecida en Francia e internacionalmente, constituye una fuerza dinámica lista para abordar los desafíos educativos relacionados con el cambio climático.
Las recientes COP han demostrado cuán esencial es la educación en la estrategia de adaptación al cambio climático de diferentes estados. Es vital no solo para crear conciencia, sino también para fomentar comportamientos sostenibles y responsables, desarrollar habilidades necesarias para la adaptación, reforzar la resiliencia, facilitar la toma de decisiones informada, estimular la innovación y fomentar la acción colectiva e inclusión social. Al invertir en la educación, dotamos a las generaciones actuales y futuras de las herramientas necesarias para abordar de manera proactiva y sostenible los impactos del cambio climático.
Enseñando hoy para un mejor mañana.